El intestino grueso es parte del sistema digestivo del cuerpo humano. Este órgano tiene un papel importante para perfeccionar el proceso de digestión de los alimentos. Para comprender mejor lo importante que es mantener una buena salud, ¡conozca la anatomía y función del intestino grueso a continuación!
Anatomía del intestino grueso
Fuente: WebMDEl intestino grueso es un órgano digestivo que rodea toda la cavidad abdominal. El órgano, también conocido como colon, se extiende desde el ciego, el saco que conecta el íleon (extremo del intestino delgado) con el colon, hasta el ano.
El colon consta de cuatro capas, a saber, la mucosa, la submucosa, la muscularis propia y la serosa. Cada capa del intestino grueso tiene una función diferente.
La mucosa es la capa más interna del colon, que consta de tejido epitelial columnar que hace que su superficie se sienta suave. La mucosa produce moco que sirve para suavizar el paso del resto de la digestión de los alimentos a lo largo del intestino grueso.
Afuera está la capa submucosa. Esta capa está formada por vasos sanguíneos, nervios y tejido conectivo que conecta la mucosa con el resto del colon.
La submucosa está cubierta por la capa muscular propia. La muscularis propia consiste en una capa de fibras musculares viscerales que se contraen para mover el tracto digestivo de los alimentos. Estas contracciones también se conocen como peristalsis.
La capa más externa es la serosa. Serosa produce un líquido lubricante en el intestino grueso que protegerá a este órgano del daño causado por el contacto con otros órganos digestivos.
Cuando se estira, el intestino grueso mide aproximadamente 1,5 metros de largo. El canal se divide en cuatro partes, a saber:
- colon ascendente: la primera parte del tracto digestivo que pasa desde el intestino delgado, ubicada en el lado derecho del cuerpo, que se extiende desde el ciego hacia arriba,
- colon transverso: el colon superior, se encuentra horizontalmente y se extiende desde el lado derecho al lado izquierdo de la cavidad abdominal,
- colon descendente: ubicado en el lado izquierdo del intestino grueso, que se extiende desde el arco del bazo hasta el colon sigmoide, y
- colon sigmoide: la última parte del colon antes de que el resto del tracto digestivo ingrese al recto, ubicado debajo del colon descendente, con forma de letra S.
Funciones y funcionamiento del intestino grueso
La función principal del intestino grueso es absorber el líquido no digerido restante del intestino delgado. Además, este órgano también es un lugar para el flujo de desechos digestivos que no es utilizado por el cuerpo hacia el recto para ser desechados en forma de heces.
Este proceso será asistido por bacterias buenas en los intestinos. Estas bacterias sintetizan vitaminas, procesan los desechos digestivos de forma líquida a sólida y protegen los intestinos de las bacterias dañinas.
El proceso también se conoce como peristaltismo y, por lo general, tarda unas 36 horas.
La digestión de los alimentos comienza desde el momento en que se lleva la comida a la boca. Los dientes mastican la comida hasta que se vuelve suave, luego se traga y entra en el esófago que está conectado al estómago.
Cuando llega al estómago, la comida se descompone en líquido antes de pasar al intestino delgado. Es en el intestino delgado donde continuará la degradación.
Con la ayuda del páncreas, el hígado y la vesícula biliar, el intestino delgado trabaja para absorber las vitaminas y los nutrientes esenciales de los alimentos. Después de eso, el resto se transferirá al intestino grueso.
Primero, por supuesto, el resto de la comida irá al colon ascendente. En el colon ascendente, los nutrientes no digeridos del intestino delgado se reabsorben. Este colon también se condensará y el alimento líquido restante se volverá más denso.
Luego, este desperdicio de comida se traslada al colon transverso. En este colon, las bacterias descomponen los desechos de alimentos (fermentación), absorben el agua y los nutrientes que aún quedan y luego transforman los desechos de alimentos líquidos en las heces.
La comida restante que se ha convertido en heces se alojará temporalmente en el colon descendente.
Cuando llegue el momento, el colon sigmoide se contraerá para empujar las heces hacia el recto. Estas contracciones causan dolor abdominal que le induce a defecar.
Enfermedades que pueden atacar el colon.
Al igual que otros órganos del cuerpo, el intestino grueso también puede verse afectado por trastornos digestivos. Las enfermedades que atacan a este órgano también varían en intensidad, tanto leves como graves.
Una de las enfermedades que suele afectar a muchas personas es la diarrea. La diarrea se caracteriza por síntomas típicos en forma de heces acuosas o acuosas. Esta enfermedad puede ser causada por una infección leve del intestino grueso.
Por otro lado, enfermedades más graves como el cáncer también pueden ocurrir en el colon. Las células cancerosas que atacan el colon pueden incluso diseminarse al recto.
Cuando se encuentra en una etapa avanzada, los síntomas harán que el paciente sienta un dolor que no desaparece y la diarrea continúa.
Otras enfermedades que también están asociadas con problemas del intestino grueso son:
- colitis (inflamación del intestino grueso),
- colitis ulcerosa,
- pólipos de colon,
- Enfermedad de Crohn,
- diverticulitis
- hemorroides,
- síndrome del intestino irritable (SII),
- salmonelosis y
- shigelosis.
¿Cómo cuidar su salud?
Después de conocer la función y el funcionamiento del intestino grueso, por supuesto, se habrá dado cuenta de lo importante que es el papel del intestino grueso para ayudar a la absorción y eliminación de los desechos de alimentos que el cuerpo no necesita.
Por lo tanto, puede mantener la salud de este órgano al:
- comer alimentos con alto contenido de fibra, como verduras, frutas y cereales integrales,
- beber mucha agua todos los días,
- limitar el consumo de carnes rojas o carnes procesadas que hayan pasado por un largo proceso como salchichas y pepitas,
- dejar de fumar,
- reducir el consumo de alcohol, y
- haciendo ejercicio.
Si aún tiene otras preguntas, consulte a su médico. También recuerde estar más alerta a cualquier síntoma o cambio que sienta alrededor de su digestión.
No dude en consultar inmediatamente a un médico cuando se presenten síntomas inquietantes.