Para la mayoría de las personas, los síntomas del reflujo ácido, como la acidez de estómago o la acidez de estómago, son fáciles de sentir después de comer alimentos ácidos o picantes. Sin embargo, existe una condición de reflujo ácido asintomático llamada reflujo ácido. reflujo silencioso o reflujo laringofaríngeo (LPR).
¿Qué es el reflujo laringofaríngeo (RPL)?
Reflujo laringofaríngeo (LPR) es una afección en la que el ácido del estómago asciende hacia el esófago y hacia la parte posterior de la garganta (faringe) o laringe (laringe). El ácido del estómago incluso puede subir a la parte posterior de las vías respiratorias nasales.
Esto sucede porque el esfínter (válvula) del esófago está debilitado o dañado y no se cierra por completo. Aun así, la LPR o reflujo laringofaríngeo a menudo se confunde con otras enfermedades que tienen síntomas similares.
Los síntomas de la LPR son similares a los de la ERGE, pero tienden a no causar acidez o sensación de ardor en el pecho y la garganta. Por lo tanto, esta condición también se llama reflujo silencioso o reflujo silencioso.
Tanto mujeres como hombres de todas las edades pueden experimentar reflujo laringofaríngeo, incluidos bebés y niños. Sin embargo, este riesgo puede aumentar si experimenta cualquiera de las siguientes condiciones.
- Estilo de vida poco saludable, como comer en exceso, fumar y beber alcohol.
- El esfínter esofágico está dañado o disfuncional y los reflejos gástricos son lentos.
- Exceso de peso.
- El embarazo.
No importa cuán pequeña sea la cantidad de ácido del estómago que sube al esófago, el revestimiento de la garganta y la laringe se puede irritar fácilmente. Por lo tanto, debe conocer los síntomas.
¿Cuáles son los síntomas? reflujo silencioso?
Como su apodo, reflujo silencioso sólo muestran algunos síntomas de ácido gástrico y tienden a ser vagos. Los síntomas de LPR que ocurren en adultos incluyen:
- sabor amargo en la garganta,
- dolor de garganta o sensación de ardor en la garganta,
- dificultad para tragar, sensación de que algo está atascado en la garganta,
- ronquera,
- toser a menudo,
- goteo posnasal crónico, una afección en la que hay demasiada mucosidad en la nariz y la garganta, y
- asma debido al ácido del estómago.
Mientras tanto, los síntomas de la LPR en bebés y niños en realidad no son muy diferentes de los de los adultos. Sin embargo, los bebés y los niños que experimentan LPR tienden a experimentar vómitos, dificultad para amamantar y dificultad para aumentar de peso.
Si sospecha uno o dos de estos síntomas, consulte a un médico de inmediato. Porque, el ácido del estómago que se eleva irritará aún más el revestimiento del esófago, la garganta y las cuerdas vocales si no se controla.
Esto puede provocar complicaciones como cicatrices, asma, enfisema, bronquitis y cáncer.
Entonces, ¿cómo solucionarlo?
La clave principal para superar el reflujo laringofaríngeo o los síntomas del ácido del estómago en silencio es adoptar un estilo de vida saludable y mantenerse alejado de los factores de riesgo. Esto incluye los puntos siguientes.
- Evite los alimentos que pueden desencadenar el ácido del estómago.
- Baje de peso si tiene sobrepeso o es obeso.
- Dejar de fumar.
- Reducir el consumo de alcohol.
- Deje de comer al menos tres horas antes de acostarse.
- Duerma con la cabeza ligeramente más alta, a unos 10-15 centímetros del colchón.
Además, esta enfermedad se puede tratar con medicamentos para la ERGE sin receta médica. Algunos ejemplos de medicamentos de venta libre son los antiácidos o los bloqueadores H-2, que son útiles para evitar que el ácido del estómago regrese al esófago.
Si estos dos medicamentos no funcionan, su médico puede recetarle un medicamento PPI como omeprazol, que puede ayudar a reducir la acidez del estómago. Por lo tanto, consulte inmediatamente a un médico para superar los síntomas de la afección LPR.